El artista digital Mike Winkelmann, mejor conocido como Beeple, acaba de romper un récord al vender una de sus obras por 69.3 millones de dólares. La obra Everydays – The First 5000 Days, es un mosaico que representa un sorprendente desafío artístico, ya que Winkelmann creó una obra de arte nueva todos los días durante los últimos 13 años. Si bien empezaron como bocetos simples hechos con bolígrafo y papel, estos proyectos diarios se han convertido en imágenes de alta calidad e incluso satíricas que abordan la política Americana, la cultura del Internet, acontecimientos mundiales y algo más.
Winkelmann cree que esta pieza en particular y su venta, que ha batido récords, tiene enormes implicaciones en el mundo del arte. Explica que, dado que Blockchain permite la posesión y la originalidad, tanto como la escasez del arte digital, podemos esperar un cambio radical en el arte tal y como lo conocemos.
Pero, ¿cómo es posible exactamente? ¿Cómo es posible que un JPG que se puede compartir fácilmente en Instagram se venda en Christie's, - casa de subastas que lleva vendiendo arte tradicional desde 1766 - ¿Cómo pudo venderse por 69.3 millones de dólares, convirtiéndose en la tercer obra de arte más cara de un artista vivo vendida en una subasta? La respuesta es que estas piezas se venden como NFT*, (tokens no fungibles), lo que da a cada pieza de arte digital un registro único y permanente, que permite autentificar una pieza igual que se podría autentificar un cuadro tradicional. *mecanismo, creado en 2017, que barca cualquier objeto virtual con identidad, autenticidad y trazabilidad, en teoría indiscutibles e inviolables, gracias a la tecnología blockchain, y que es utilizada para criptomonedas como el bitcoin.
Esto hace que la pieza sea única y permite que se transfiera a su propiedad y adquiera un valor monetario. Así es como funciona el criptoarte. Las NFT permiten que las oras de arte se intercambien igual que criptomonedas.